NO DEJES QUE TE AFECTE

Todos estamos pasando por momentos muy interesantes. Parece que el mundo está al revés y que todo está más loco que nunca. No solo estamos experimentando una forma de vida completamente nueva debido a la pandemia de COVID-19, sino que también muchos se sienten presionados por las consecuencias económicas de la pandemia, el controvertido entorno político en el que vivimos y los disturbios sociales y la violencia que están ocurriendo actualmente en todas partes. Parece que ya no se puede hacer nada, que nuestros líderes son sólo títeres de poderes superiores, que las instituciones en las que podíamos confiar antes ya no son confiables y que nosotros, la gente, ya no contamos para nada en absoluto. Sin embargo, no importa lo malo que parezca, la solución está en nuestras manos la mayor parte del tiempo.

La mayoría de nosotros nos hemos visto afectados directa o indirectamente por una o más de estas variables de una forma u otra, incluyendo nuestra salud, finanzas, empleo y / o incluso libertad; y en muchos casos, las consecuencias han sido catastróficas. Si a esto le sumamos la incertidumbre del futuro cercano (aunque ¿cuándo hay algo realmente certero?); la inestabilidad económica y política; y el descontento social y los disturbios por lo que está sucediendo en todas partes; entonces obtendremos una imagen triste que nos la están restregando en la cara todo el día las noticias y redes sociales sensacionalistas y muchas veces engañosas.

Aunque parezca que estamos al borde de una revolución, de un nuevo orden, y que las cosas han llegado a un punto sin retorno, nada ha cambiado realmente tanto. Si miras hacia atrás en la historia, los humanos han experimentado estas y muchas otras situaciones peores muchas veces en el pasado. Puede que no sean exactamente las mismas situaciones, pero los humanos han pasado por muchas situaciones similares y / o tremendamente peores en el pasado. Por ejemplo, los siglos XIX y XX fueron consumidos por plagas, guerras, enfermedades, hambre, dificultades económicas, etc. La diferencia ahora son los medios de comunicación. Simplemente tenemos más acceso a lo que está sucediendo no solo localmente sino en todo el mundo, y nos llega de forma específica y con una agenda. Tengamos en cuenta que controlar la información del mundo es manipular todas las mentes que la consumen.

La historia de la humanidad y la historia de cada uno de nosotros siempre ha estado, y siempre estará, llena de desafíos. La vida es cambios y con cambios vienen desafíos. ¡Ésta es la naturaleza de la vida! Por lo tanto, es mejor darse cuenta y admitir esto y comenzar a hacer algo al respecto ahora, no cuando esto suceda o cuando aquello suceda, porque siempre habrá algo sucediendo. ¡No hay mejor momento que ahora! Empieza por darte cuenta de que tu bienestar y felicidad no dependen del exterior, de lo que sucede a tu alrededor, sino de lo que sucede dentro de ti. Entonces puedes pasar por todo esto sin que esto te afecte. Sí, muchas de estas variables pueden haberte afectado directa o indirectamente de una manera fuerte o suave, pero siempre que te des cuenta de eso, puedes seguir adelante, aprovechar las nuevas oportunidades que aparecerán y superar cualquier desafío independientemente de la dureza y complejidad sin ningún juicio.

La clave es crear un entorno personal, una burbuja per se dónde vives, no de acuerdo con las reglas de lo que está sucediendo afuera, sino con tus propias reglas. Es un entorno personal en el que vives de acuerdo con tu moral, valores y deseos, y no depende de la moral, valores y deseos de la sociedad, el gobierno o el mundo. Si haces eso, si eres capaz de vivir en paz y felizmente en él, y si lo aplicas a tu hogar, trabajo y vida social; casi no importa qué político sea elegido, qué partido gane las elecciones, cuán caótica o negativa la sociedad es, o lo que está pasando a tu alrededor o alrededor del mundo.

El cambio no comienza fuera de ti. El cambio comienza dentro de ti y se propaga hacia afuera con un efecto dominó, como el guijarro que cae en un lago quieto, para tocar la vida de todas las personas con las que entras en contacto. No esperes un cambio, sé el cambio que deseas ver. Sé una mano para los desamparados, un hombro para los desconsolados, una columna para los débiles y una fuente para los sedientos. ¡Sé la luz que quieres ver en el mundo! Cada uno de nosotros puede, una vida a la vez, pero debes comenzar contigo mismo, desde adentro hacia afuera.

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Autor: Mauricio Correa
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