LO QUE PODEMOS APRENDER (2DA PARTE)
En la
primera parte de este artículo publicado hace unas semanas dije que los humanos
no hemos estado escuchando las enseñanzas que nos han estado dando los animales
a lo largo del tiempo y que, al final, no son realmente tan diferentes a
nosotros en términos de cuerpo, mente, emociones, razonamiento complejo y
lenguaje, etc. Hay dos preguntas que quedan por responder: ¿cuáles son algunas
de estas enseñanzas y hay alguna diferencia que distinga a los humanos, de manera
única, de todos los demás animales? Comencemos con solo algunas
de las muchas lecciones que los animales tienen para nosotros.
Los
animales, por su propia naturaleza, viven enfocados en el momento, en el aquí y
ahora, mientras que nosotros, como humanos, con demasiada frecuencia nos
distraemos con pensamientos y vivimos enfocados en el pasado y el futuro. Ellos
están conectados, alertas y atentos a sus sentidos y todo lo que los rodea,
respondiendo a las señales del mundo, asegurando su supervivencia por medio de vivir
de, y con, unos de los otros, y manteniendo ecosistemas equilibrados a su
alrededor; mientras que nosotros hemos perdido estas conexiones y las seguimos
perdiendo a medida que nos alejamos de la naturaleza con la idea de volvernos
más 'civilizados'. Debido a esta desconexión con la naturaleza y con todo,
estamos destruyendo los ecosistemas, el planeta y, al final, a nosotros mismos.
Los
animales están enfocados en lo que es importante, mientras que la mayoría de
nosotros somos desorganizados y estamos enfocados en actividades triviales, y a
veces sin sentido, la mayor parte del tiempo. Ellos se expresan verbalmente y a
través de acciones, posturas y estados de ánimo, mientras que nosotros ignoramos
la mayoría de estas señales y confiamos específicamente en las palabras,
descuidando la mayor parte del tiempo por considerar otras formas de expresar
nuestro mundo interior (enredados o abrumados por nuestras propias palabras y /
o las palabras de otros). Ellos toman tiempo para descansar cuando es necesario
mientras que nosotros llenamos nuestros días con actividades y no tomamos
tiempo para descansar, reflexionar y meditar.
Los
animales no toman la vida demasiado en serio, jugando, descansando, comiendo,
etc. como ellos quieren mientras que nosotros tomamos la vida demasiado en
serio y no solemos tener tiempo para nada. Ellos no tienen ningún sentido de lo
correcto o incorrecto, bueno o malo, blanco o negro, etc. mientras que nosotros
nos atrapamos en la polaridad de la vida todo el tiempo. Básicamente, no
podemos aceptar las cosas como son, tal como se nos presentan, sino que tenemos
que juzgarlas y ubicarlas en algunas categorías sin sentido. Ellos viven dentro de sus posibilidades y no abusan
ni causan una destrucción innecesaria a su entorno, mientras que nosotros
hacemos todo lo contrario.
Si bien los
animales, ciertamente, sufren dolor, desgracia y miseria, lo sobrepasan con
mayor aplomo que los humanos. La continuidad de sus vidas prima sobre
revivir el pasado. Vemos esto
a menudo después de que un tigre o un león atacan a una gacela, una cebra o un
búfalo. Minutos después, ellos están comiendo como si no nada hubiera pasado. Nosotros,
por otro lado, a menudo nos vemos atrapados en repetir y revivir palabras y
experiencias pasadas que, para muchos, cicatrizan todas sus vidas. Finalmente, los
animales dan y comparten amor incondicional sin importar lo mal que los hayamos
tratado en ocasiones, mientras que los humanos solemos medir todo y
condicionarlo en base a numerosas variables externas.
Como puede
ver en algunas de las muchas lecciones que tenemos de los animales, ellos
tienen mucho que enseñarnos. De hecho, ¡algunas de las mejores lecciones en
la vida no siempre provienen de los humanos! Ahora, pasemos al
siguiente punto de la agenda: ¿hay alguna diferencia que distinga a los
humanos, de forma única, de todos los demás animales? Como hemos visto a lo
largo de este documento, no hay diferencias importantes entre ellos y nosotros,
al menos hasta ahora. La única diferencia podría residir en el grado de
evolución, o más específicamente, en el grado de desarrollo de nuestro sistema
nervioso.
Es cierto
que, por alguna razón inexplicable, el sistema nervioso humano, incluyendo el
cerebro, se ha desarrollado bastante rápido en un tiempo relativamente corto en
comparación con otras especies, ayudándonos a mejorar considerablemente nuestra
vida, pero este hecho no nos hace superiores ni mejores. Al contrario,
debería hacernos más comprensivos, compasivos y amorosos con otras especies,
con la naturaleza en general…entre nosotros. No usamos y / o
abusamos de un niño solo porque no es tan capaz o inteligente como un adulto. Al contrario, los amamos y
apreciamos por lo que son. Celebramos la vida cuando los vemos porque
son la verdadera manifestación de la creación, de la pureza.
Sabemos
que 'nuestro cerebro, y más específicamente nuestra mente, es muy poderoso/a,
pero nadie sabe realmente cuán poderoso/a es, ni siquiera los científicos'. Por lo tanto, se nos ha dado esta herramienta
poderosa sin un manual de usuario y sin educación sobre cómo utilizarla y cómo
trabajar con ella. Ni siquiera sabemos realmente cómo funciona. Una vez
que te das cuenta de eso, el resultado es obvio: solo puede ser un accidente. Si te regalan un dispositivo muy
avanzado y no sabes cómo funciona y cómo usarlo, lo más probable es que trabajar
con él será solo un desastre, un accidente. Esto es lo que nos está
sucediendo en nuestras vidas con nuestra mente.
En otras
palabras, nuestras mentes están trabajando contra nosotros la mayor parte del
tiempo y no nos damos cuenta. ¿Por qué? Porque no somos conscientes del problema en la
mayoría de los casos, porque es nuestra mente y creemos que está bien, y porque
todos estamos sufriendo del mismo problema. Solo piense en esto, la mayoría de los seres
humanos han estado construyendo una personalidad desde una edad temprana, llena
de cosas como una imagen de sí mismos, un estado, identificaciones, inseguridades
(miedo, resentimiento, envidia, ira, celos, etc.), creencias, juicios,
prejuicios, etc., que son, básicamente, estructuras mentales auto creadas que
van definiendo continuamente el comportamiento humano (pensamientos, acciones y
emociones), que nada tienen que ver con la realidad, y que, muchas veces,
resultan contraproducentes para su bienestar.
Solo hay
un área en la que ese grado de diferencia, de evolución, puede marcar una gran
diferencia y es en el área de la 'autoconsciencia, nuestra consciencia de sí
mismos'. Aunque los
animales parecen tener cierto sentido de autoconsciencia, los humanos somos
completamente autoconscientes, dándonos total individualidad y libre albedrío. Sin
embargo, debido a nuestra continua necesidad de estar ocupados y distraídos en
todo momento, la mayoría de los humanos no son realmente conscientes de sí
mismos la mayor parte de su tiempo… y peor aún, la mayor parte de sus vidas.
Esta
consciencia es fundamental para abrir puertas que no están al alcance de ninguna
de las otras especies, las puertas del yo interior y de otras dimensiones que
no están disponibles a través de nuestros órganos sensoriales y / o nuestra
inteligencia. Por
lo tanto, todos tenemos una opción: podemos nacer, crecer, trabajar,
reproducirnos y morir como cualquier otro animal o podemos trascender esta
biología y movernos a estados superiores del ser. Cualquiera de los dos está
bien, pero la última le permitirá experimentar cosas que son imposibles de
experimentar con la primera opción. ¡O se da cuenta de eso ahora o lo hará
cuando muera! ¡Su elección!
---------------------
Si te gusta este artículo, por favor suscríbete (es gratis) y / o compártelo con otros a través de tus redes sociales. Tu ayuda divulgando estos mensajes es muy apreciada.
Autor: Mauricio Correa
Páginas Web: rutaauno.com
Blog: p2oblog.blogspot.com
Gracias, Maestro! Me encantó
ReplyDeleteMe gustaría uno sobre las redes sociales y la distracción que provocan..
ReplyDeleteCon gusto Paula. Gracias por tus comentarios. Tus deseos seran realidad en el proximo articulo que publique.
Delete